Se recomienda que la cirugía de implantes de glúteos no se realice en los siguientes casos
- Pacientes con infecciones activas en cualquier parte del cuerpo.
- Pacientes con diabetes no controlada debido a un mayor riesgo de infección y problemas de cicatrización.
- Las pacientes con obesidad no deben someterse a un aumento de glúteos debido a un riesgo más elevado que el promedio de desarrollar seromas. La obesidad aumenta la fuerza de corte (o estrés posicional) en la región de los glúteos, lo cual aumenta las probabilidades de acumulación de líquidos durante la recuperación.
- Pacientes con características de tejido clínicamente incompatible con la gluteoplastia, como daño del tejido como resultado de radiación, tejido inadecuado, vascularización comprometida o ulceración.
- Pacientes con cualquier condición —o tratamiento— que el cirujano considere que constituya un riesgo quirúrgico injustificable (por ejemplo, enfermedad cardiovascular inestable, coagulopatías, problemas pulmonares crónicos, etc.)